La última artimaña del presidente de la Real Federación Española de Fútbol ha sido la proclamación de Toni Freixa -portavoz y secretario de la junta directiva del Barcelona- como nuevo vocal de la RFEF.
"Podremos hacer llegar directamente nuestras propuestas de funcionamiento de comités y de todo el sistema disciplinario de la Federación. El Barça tiene que estar presente en todas las federaciones en las que participa", comenta Freixa.
Aparte del evidente imparcialismo del que será participe el nuevo miembro de un organismo que debería de componerse por personas que no estén ligadas directamente a ningún club, Toni Freixa es popular gracias a su anti-madridismo y su nacionalismo catalán, retratadas en multitud de ocasiones, como por ejemplo las mostradas en aquel bochornoso espectáculo en el que Freixa expresó, después de que le pidieran que hablara en español, un "pensaba que me libraría de ello".
En casos normales, sería curioso que un anti-español sea miembro de un órgano que se ocupa de lo relativo al fútbol español. En una federación presidida por Villar, no.
Destacable sería también, que de un secretario activo del Barcelona dependieran decisiones relativas a la Liga donde compite el club al que representa. En una federación presidida por Villar, no.
El Villarato sigue "on fire".
0 comentarios:
Publicar un comentario